La pandemia ha evidenciado, por si cabía alguna duda, la utilidad de los modernos purificadores de aire. ¿Necesidad o capricho?  No se trata sólo de una cuestión de confort para el usuario, sino también de seguridad, en tanto estos aparatos colaboran a eliminar virus y “limpiar” la estancia de invitados indeseados y microscópicos. La limpieza  suele ser el principio de la felicidad.

Es evidente, que   el uso de purificadores se ha multiplicado tanto en hogares como en empresas. Hay que tener cuidado, no obstante, de que estos aparatos nos lleven a relajar el uso de mascarillas y otras medidas de seguridad como la propia ventilación natural, que siguen siendo importantes.  Ese olor a limpio es el mejor ambientador.

Lo mismo sucede en el mundo camper y, en concreto, con las caravanas y autocaravanas. Existen una serie de purificadores de aire de nuevo diseño que eliminan virus y bacterias garantizando la calidad del aire en ambientes cerrados como, en ocasiones, ocurre con estos vehículos.

Hay otro elemento que no deja de llamar la atención.  Convivencia y olor son temas que  suelen ser motivo de fricción entre los usuarios de un vehículo.  También ayudan, por supuesto, a eliminar malos olores y posibles gases nocivos (formaldehido, benceno, amoniaco…) en el interior del habitáculo, y en el caso de personas asmáticas o con algún tipo de alergia.

Si bien es cierto que el verano hace que ventilemos más la autocaravana, hay que recordar que estos vehículos se utilizan todo el año y que la pandemia no va a desaparecer inmediatamente. El resultado de esterilización, no obstante, es de un extraordinario 99,9%, con el mismo porcentaje en cuanto a eliminación de polvo.

El uso de purificadores, por tanto, colabora a instaurar medidas de limpieza del aire que son necesarias todo el año. Los modernos purificadores esterilizan los iones del aire y ayudan a mantener nuestra salud   aunque estemos respirando durante mucho tiempo en ambientes cerrados.

Lo hacen mediante el uso de tres módulos integrados que funcionan de manera simultánea, uno de ellos luz ultravioleta. Además, suman una lámpara UV y un fotocatalizador que desinfectan el aire. Un filtro HEPA de retorno doble remata la labor de estos aparatos a la hora de purificara el aire.

La nueva generación de purificadores de aire no ocupa mucho espacio y además consumen poca electricidad, solo 8W hora. Poseen interruptores de apagado automático que permiten despreocuparse de ellos una vez conectados. Un nivel de gasto que, en todo caso, se adapta perfectamente a la vida en una autocaravana, caracterizada por un estilo de vida dinámica y donde la energía al fin y al cabo es limitada.